jueves, 24 de diciembre de 2009
miércoles, 9 de diciembre de 2009
Hambre
En los últimos meses las noticias sobre el aumento del hambre en Guatemala han saltado a las páginas de los periódicos. La muerte de varios niños a consecuencia de la desnutrición en un hospital sacudió al país centroamericano.
Hoy, con los datos del último informe médico de Apadrinamiento en la mano, constatamos que esta lacra también nos afecta directamente. De los 236 niños y niñas del proyecto, 45 presentaban el pasado mes de septiembre cuadros de desnutrición, y 7 de desnutrición leve.
No es la primera vez que ocurre, de hecho, los pequeños que entran en el programa provienen de las familias más desfavorecidas de Pochuta, y dada su situación tienen muchas posibilidades de padecer carencias de alimentación al ingresar.
Desde Bateginez, se asegura una cesta de alimentos básicos para toda la familia, la escolarización del niño apadrinado y una revisión sanitaria al año, además de un seguimiento exhaustivo de cada pequeño a lo largo del año por parte del promotor encargado de su finca o barrio. Nuestros compañeros de la organización Apsadec, se encargan de que todo funcione. Así nos lo explican en una carta que envían junto a los informes individuales de salud de cada niño y niña apadrinado:
"El médico aconsejó que a los niños/as con diagnóstico naranja y amarillo (desnutrición leve y desnutrición grave) se les diera un atol de Incaparina (un suplemento alimenticio), muy completo que ayuda a nutrir. A estos niños/as se les da seis bolsas de incaparina más, y por acuerdo de la Junta y personal, el promotor irá a monitorear a estos/as niños/as todos los días para ver si están tomándolo. En enero se les volverá a pesar para ver cómo van. El objetivo es lograr que pasen a color verde (buena salud)"
Hoy, con los datos del último informe médico de Apadrinamiento en la mano, constatamos que esta lacra también nos afecta directamente. De los 236 niños y niñas del proyecto, 45 presentaban el pasado mes de septiembre cuadros de desnutrición, y 7 de desnutrición leve.
No es la primera vez que ocurre, de hecho, los pequeños que entran en el programa provienen de las familias más desfavorecidas de Pochuta, y dada su situación tienen muchas posibilidades de padecer carencias de alimentación al ingresar.
Desde Bateginez, se asegura una cesta de alimentos básicos para toda la familia, la escolarización del niño apadrinado y una revisión sanitaria al año, además de un seguimiento exhaustivo de cada pequeño a lo largo del año por parte del promotor encargado de su finca o barrio. Nuestros compañeros de la organización Apsadec, se encargan de que todo funcione. Así nos lo explican en una carta que envían junto a los informes individuales de salud de cada niño y niña apadrinado:
"El médico aconsejó que a los niños/as con diagnóstico naranja y amarillo (desnutrición leve y desnutrición grave) se les diera un atol de Incaparina (un suplemento alimenticio), muy completo que ayuda a nutrir. A estos niños/as se les da seis bolsas de incaparina más, y por acuerdo de la Junta y personal, el promotor irá a monitorear a estos/as niños/as todos los días para ver si están tomándolo. En enero se les volverá a pesar para ver cómo van. El objetivo es lograr que pasen a color verde (buena salud)"
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