No bien comenzaba este año 2009 cuando la prensa nos sorprendió con una terrible noticia. Había desaparecido la hija del alcalde de Pochuta, “Lisbeth Vásquez Duarte, de 22 años […] desapareció ayer a eso de las 22 horas. Hoy fue hallado el vehículo de la mujer; en el interior había gorros pasamontañas y el cargador de un fusil AK 47 .
La cercanía nos hizo poner nombre al último episodio -aquel día- de una película que ya cansa en Guatemala. Ante la ineptitud y, probablemente, la implicación de todos los estamentos responsables (Policía, Justicia, Gobierno...), la violencia volvía a cebarse con una mujer. Maldita herencia de los tiempos de la guerra interna. Y ya son más de 3300 desde que alguien se puso a contarlas... en 2001. Una auténtica sangría en un país de poco más de 12 millones de habitantes.
El 'feminicidio' se labró su nombre en la cercana Ciudad Juárez de México, pero es en Guatemala donde podemos ver toda la extensión y la crudeza de su signficado. Verdaderas mujeres coraje, estas sí, se han dedicado a luchar para que los crímenes no queden impunes, para que alguien haga justicia a esas mujeres y niñas torturadas salvajemente, violadas y asesinadas que pueblan las zanjas de los caminos de este país de los horrores.
1 comentario:
Ya constataron esta penosa realidad en Guatemala. El esfuerzo y lucha de todas y todos para acabar con esta impunidad que corroe nuestra sociedad es parte del aporte para salir a flote.
A ustedes gracias por su trabajo materializado en jovenes (hombre y mujeres) que cuentan con herramientas para mejorar sus oportunidades como las de su comunidad.
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